Más de seis millones de compatriotas en situación de desempleo. No podemos resignarnos a que la política que se está realizando es la correcta, que no se puede hacer otra cosa, que es lo correcto como no para de decir el Presidente Rajoy. Porque el drama sigue creciendo día tras día.
Ni la UE, ni el Gobierno Rajoy pueden seguir la senda del recorte, ni el control del déficit a toda consta soluciona los problemas. No pueden seguir empecinados, por mucha ideología sin complejos que practican, en lo que no funciona y solo produce dolor y problemas a las familias.
Está demostrado, incluso, que además de una decisión ideológica profundamente conservadora, es un error académico y teórico. Otros países están demostrando que aplicando políticas de crecimiento y de estímulo de la economía van mejor, crean empleo, mantienen políticas de solidaridad y bienestar. Crecen mejor y salen antes de la crisis.
Hay otra política posible que va desde priorizar recurso, hasta combatir con decisión la pobreza. Desde reformar la fiscalidad para que las rentas del capital rindan como las del trabajo, hasta tasas a los bancos por transacciones. Desde inversión en educación e investigación para ganar el futuro, hasta rentas de inserción en el mundo del trabajo para jóvenes.
Otra política ya no solo es posible, es que es necesaria.
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