Subasta de medicamentos

Dos modelos de atender a las demandas de optimización de los recursos sanitarios.

Por un lado hacer recaer en el enfermo los costes de una parte, cada vez mayor, del valor de los medicamentos a la vez que se retiran algunos básicos del sistema  publico.

Por otro, incidir en los margenes de las grandes industrias farmaceúticas de forma que se abaraten los precios y no repercutan los necesarios ahorros en los enfermos por la vía de las subastas de aprovisionamiento de fármacos.

Estas dos posiciones se han confrontado, hoy, en el pleno del Senado producto de una moción del grupo socialista.

Resumiendo, el modelo de Andalucia de subasta para las ofertas de los productos farmaceúticos  y no incrementos por copago a los ciudadanos  y el modelo del Gobierno Rajoy de hacer soportar cada vez mas en el ciudadano los costes de una sanidad que ya financia con sus impuestos.

Parece más razonable la subasta. Y más equitativa.